Sorpresivamente, y luego de una serie de reuniones, el (¿ex?) presidente Néstor Kirchner y el ex candidato presidencial por la Concertación Por Una Nación Avanazada (UNA) acordaron avanzar en la normalización del Partido Justicialista, con Kirchner a la cabeza disputando la presidencia y Lavagna acompañandolo en la vicepresidencia primera.
La alianza de Lavagna con la UCR oficial ya es historia. Gracias a una serie de contactos encomendados por Kirchner al senador Jose Pampuro, el sector que encabeza el ex ministro de Economía regresa de manera triunfal al PJ, con aspiraciones propias de ocupar un lugar destacado en la próxima conducción del partido.
De esta manera, Kirchner busca seguir cooptando dirigentes para ampliar la llegada de su poder y la base de sustentación del Gobierno de su esposa, Cristina Fernández, garantizando la gobernabilidad y la relación de la administración con otros sectores, como los sindicatos y las empresas.
La reconciliación entre el ex presidente y quien fuera su ministro de Economía en los primeros dos años y medio de gobierno fue confirmada a Clarín por los propios protagonistas, luego del encuentro del viernes en Olivos, donde Kirchner reside en su caracter de "primer ciudadano".
Ambos dirigentes salieron a explicar los alcances del acuerdo. "Con el doctor Lavagna coincidimos en la necesidad de reorganizar al justicialismo como un partido de centro progresista, respetando la diversidad interna y dando espacio a las distintas expresiones partidarias", dijo Kirchner. Agregó que también hubo coincidencia en el diagnóstico acerca de que "estamos frente a una perspectiva de reagrupamiento de la derecha y el liberalismo, y es preciso superar diferencias entre quienes pensamos de la misma manera, para darle sustentabilidad al proceso de crecimiento y cambio que iniciamos en 2003 y continúa ahora con la presidencia de Cristina".
Entonces, a ver si nos entendemos: ¿resulta ser que estos dos señores piensan de la misma manera y son la expresión del progresismo argentino? ¿Dónde quedaron las críticas de Lavagna hacia el Gobierno por la situación en el INDEC y el desborde la inflación?. Igual, no nos apresuremos en brindar respuestas.
Por su parte, Lavagna afirmó que el reconocimiento de la diversidad interna es clave en el acuerdo. Y sostuvo que la reorganización del PJ toma como premisa "la existencia de una mayoría, que expresan el ex presidente y la actual Presidenta, y de una primera minoría", que es el sector peronista que lo acompañó en la elección de octubre.
¿Lo podemos interpretar como el retorno de los hijos pródigos a casa? ¿O como una mera estrategia electoral del gobierno para restarle votos a Elisa Carrió, titular de la Coalición Cívica, el único riesgo para ellos de ir a ballotage? No podemos afirmarlo con total certeza, pero sí podemos intuir que algo tiene que ver en todo esto. El propio senador Pampuro admitió que los contactos habían comenzado a través de su persona el año pasado, luego de las elecciones, lo que nos da la idea de la falta de seriedad de Lavagna con respecto a sus declaraciones y la pérdida de sus convicciones, que el 28 de octubre a la noche dijo procurar sostener.
En primer lugar, esta actitud del ex ministro es una falta total de respeto a más de 3 millones de argentinos que lo votaron en caracter de alternativa al gobierno y porque claramente no querían continuación de la política K. Es una verguenza total y una burla en la cara de estos votantes, quienes se identificaron con un discurso opositor y crítico de las falencias de la actual gestión.
En segundo lugar, es una lección para la UCR oficial que buscó aliarse a cualquier precio con tal de recuperar un poco de terreno, muy desgastada por la salida de los radicales K del aparato partidario; ahora queda en una situación todavía más crítica y deja muy mal parado a otros dirigentes de larga trayectoria, como el ex presidente de Raúl Alfonísn, quien obligado por las circunstancias, llegó a decir ante los medios que Carrió padecía "problemas mentales" y que tenía "delirios místicos".
Por último, cabe destacar que la dirigente de la CC tampoco se equivocó en esta oportunidad. En tiempos de campaña había advertido que Lavagna era "el kirchnerismo sin K" y que no podía "representar la autentica oposición al gobierno". Hoy vemos claramente que tenía razón. En declaración a la Agencia DyN, dijo sobre esta situación que "era absolutamente previsible" y lanzó una advertencia categórica "a nosotros no nos van a cooptar".
Por su lado, el titular de la UCR y ex-compañero de fórmula de Lavagna, Gerardo Morales se sumó a las críticas diciendo que era "lamentable y patético" mientras que el lider de Recrear, Ricardo Lopez Murphy, deslizó que "mucha gente fue inducida a un voto equivocado". "La estrategia del Gobierno en las elecciones del 2005 y del 2007 ha sido la de pseudodividirse y después reagruparse; lo increíble es que la ciudadanía compre esto", planteó también. Y la verdad, me parece un auténtico llamado de atención que no deberíamos obviar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario